Una noche te vi, y me quedé prendido de tu belleza. Siempre supe que jamás te podría alcanzar, pero aun así lo seguiré intentando.
Espero que llegue la noche en que yo este junto a ti, allí donde tú estás. Siempre sueño contigo, ya que todas las noches te veo al acostarme, decido asomarme a la ventana para poder observarte un rato y disfrutar de tu encanto.
No conseguiré olvidarte, también será porque no lo deseo, siempre estas dentro de mí, eres la única que me da fuerzas para seguir adelante y poder hacer lo que hago y lo que me gusta, solo tú me das esa fuerza.
Por eso gracias, lástima que no puedas leer esto, tampoco podrás escucharlo, pero sé que lo sentirás ya que siempre te llevo junto a mí.
Algo corto, pero intenso. Escrito en un momento de relajación, espero que os guste. Gracias por seguir pasando por aquí y dedicar una mínima parte de vuestro tiempo, para leerme.